Me perdí en su mirada, es que el color de sus ojos me encantaban; no eran ni azules, ni verdes. Eran color café, café que quita el sueño, café que produce desvelos. Amante querido amante, amas como ama el amor completamente imperecedero, me demostraste lo fuerte que fuiste para no darlo a entender; amante querido amante como dejar de amarte.
Dentro de una relación muchos logramos madurar, por cuestiones que terminan colocando en duda la verdadera prioridad o confianza. Por ello es trascendental dar alas para poder volar, mientras mas abstengas a un persona es mas probable que falle de alguna forma dado que su confianza es mínima; un ejemplar de ello es un auto sin gasolina, puedes quedarte dentro todo el tiempo que quieras pero sin hacer absolutamente nada.
No es de olvidarse vivir su propia vida aun construyendo una nueva junto a otro, porque de alguna manera luego de dar mucho o todo, al dejarlo quedarías sin nada.
Si que es bueno estar junto a los seres que amamos, pero, ¿sera para siempre la estadía de ellos en nuestra vida?, se viven grandes momentos y si luego se van quedan recuerdos, es bueno fomentar el amor y mas si con eso hacemos crecer raíces para tenerlos como queremos y hacerlos volver. Y te quiero, si supieras cuanto te quiero. Lastimosamente no puedo detenerte, contigo quería jugarme la vida.
No se lo que esta pasando, pero si me amas y yo igual porque hay tanta distancia así. Tantos motivos que te di para quedarte, dime y ahora ¿a quien realmente amas? a mi que te doy argumentos, te admiro y te aconsejo. O a el quien muestra lo que realmente no es.
Juro que hice las maletas queriendo volar y las deslizo el temor a lo que siento. Porque si amarte es exigirte entonces no te quiero.