domingo, 4 de febrero de 2018

Querido Amigo tienes una Correspondiencia...


Por tu mente seguramente pasa por qué estas manera de hacerlo, porque dejarte un escrito. A lo que  respondo con la sencilla razón de que me haces bien, alegras partes de mis días, me ofreces una honesta amistad; en reducidas palabras me siento confiada y segura.

La cosas han avanzado y me han dejado claro la gran persona que eres, con esto no digo que será infinito pero agradezco que brindes de ti lo mejor hacia mi. Sin esperar nada a cambio y viceversa. Es tan reconfortante conversar contigo, tal vez no las observes como las mejores conversaciones pero te confieso que me han calmado en muchas ocasiones. 

Me encontrarás con la disposición de escucharte y ayudarte. 

En tan poco tiempo he sentido admiración por ti, por todo lo que haces, lo que has logrado y lo que te has propuesto. Y así soy; expresando en palabras las grandes y maravillosas cosa de la vida y tu eres una de ellas. Muchos dicen que el destino te regala las mejores personas y creo que mi destino lo hizo de una manera muy extraña pero me contenta el alma por guiarme a quien realmente me deja calma.

Hoy tome la voluntad de escribirte para que conocieras una faceta de mi, para obsequiarte mis palabras, para confesarte que aun siendo desconocido y llegaste a mi vida sin buscarlo, ocasionaste buenas cosas en mi por eso te doy la bienvenida a mi vida, la vida de una simple escritora. Para decirte que eres mi calma en medio de una guerra. 

Cualidades de una amistad entender y ser entendido , espero y lo tomes a bien.  Ten seguridad que cuando las cosas lleguen a cambiar  yo  te lo diré. 

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